Le dije a mi novia Lana que estaba tan emocionado "como una colegiala" porque ibamos a tener nuestra primera vez. Ella me dijo que no le gustaban los hombres que mostraban algún signo de feminidad, así que se abalanzó sobre mí. Dijo que si quería ser una colegiala emocionada, ¡que así fuera! Agitó las manos y de repente yo era una colegiala con uniforme y todo, ¡vistiendo un lindo suéter, falda corta, medias y tacones altos! Me dijo que ahora podía ser esa colegiala emocionada, y dijo que necesitaba un hombre de verdad, ¡porque yo ya no tenía lo necesario para contar como un hombre!
Llamó a su hermano mayor desde la sala de estar y le dijo que una colegiala emocionada estaba esperando sexo. Su hermano Aaron entró en la habitación, un macho alfa alto y musculoso. Se bajó la cremallera y sacó una polla enorme y gruesa. Dijo: "Después de que le llene el coño hasta el borde, ya no será la colegiala, sino una futura mamá y mi joven esposa".
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